El colista visitaba el Pabellón de El Llano, en cuya pista su pudo ver la distancia que separa a ambos conjuntos. El Biesca dispuso un buen sistema defensivo que maniató a sus rivales que apenas crearon ocasiones claras de peligro. En ataque trabajó bien sus sistemas igualmente el conjunto gijonés dándole ritmo a la bola y materializando sus ocasiones con goles que venían a ser la culminación del trabajo de todo el equipo. Al descanso se llegó con un claro resultado de 7-0 favorable a las locales. Tras la reanudación el encuentro siguió por los mismos derroteros, dando Fernando Sierra, entrenador gijonés, entrada a todas sus jugadoras en un partido que no tuvo mayor historia.